Arribó con personal de seguridad, con look deportivo y una sonrisa brillante mientras todas las miradas se perdían en ella. Entonces se detuvo delante del sitio especialmente acondicionado para la conferencia de prensa en un shopping porteño y cuando posó como una top model detonó una tormenta de flashes. No era una modelo sin embargo, aunque podría serlo tranquilamente. Era la mejor jugadora del planeta de hockey sobre césped. La capitana de Las Leonas campeonas mundiales. La dueña de la magia. La crack. Era Luciana Aymar.
Suelta, con el manejo de la situación y envuelta en un ambiente en el que se la ve cada día más cómoda, rápidamente tomó la palabra y desactivó todos los rumores que se habían especulado: “No se preocupen que no voy a decir nada raro. Estoy descansando y quiero anunciar que de acá al año que viene voy a estar fuera de las canchas. Aunque el Chapa quiera llevarme a Sudáfrica ya lo tengo decidido”, dijo Aymar. Y continuó: “Quiero hacer mis cosas. Estoy feliz de haber podido dar todo para el Mundial. El entrenamiento fue duro y la preparación es diferente a los 30 que a los 20. Hay mucho estrés y el nivel de exigencia incluye cancha, pista de atletismo, pileta, psicólogo.
¿Te ves en los Juegos Olímpicos de Londres 2012?
¿Qué harás hasta fin de año?
¿Sentís la presión social de casarte y tener hijos?
¿Qué posición tomaron Las Leonas ante la difamación que sufrieron de parte de los responsables del boliche rosarino en el que se hizo la fiesta del Mundial?
¿Qué sucederá tras la renovación del plantel del seleccionado?
Pícara, Aymar. Sonriente, no abandonó la mueca de felicidad ni un instante. Y ante el pedido final, cerró con un consejo: “Nunca dejen de soñar, que las cosas se logran”. Ella ya logró mucho vestida de Leona. Y ahora, con nuevos desafíos, buscará seguir brillando.
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